Hay personas que en el transcurso
de su vida, me han servido de modelo: por sus valores y por el tesón de su
trabajo. Algunos de ellos le es podido entregar mi admiración por escritos, a
otros verbalmente y a otros entregándome a su
apoyo.
Es valorado a la persona por su personalidad, por su entrega a lo que le toca hacer, por su trabajo, por su honestidad, por su sinceridad, por su responsabilidad y por su amor a la patria. En el Archivo general de la Nación, su trabajo servirá de ejemplo.
Roberto Cassá, está entre esa persona, siempre es sentido una admiración y respeto; hacia él. El legado de historiador es enorme, su bibliografía tienen varias ediciones cada una. Y, como profesor su dedicación y responsabilidad en el aula. Fue motivo de reconocimiento por la UASD.
Entre a la Universidad Autónoma de Santo Domingo, en 1977. Fue mi profesor en varias asignaturas. En 1981, tuvo la gentileza de dedicarme la: “Historia social y económica de la Republica Dominicana” tomo l, con estas palabras: “Al amigo Dionicio Peña, con la consideración y aprecio de Roberto Cassá.”
En septiembre de 1992, me apoyo al hacerle la “Presentación” de mi primer libro: “La Ciudad Amurallada. Santo Domingo Colonial”, escribió: “Con este libro, quien no conozca la ciudad dispondrá de un aliciente para venir a verla; quien solo la conozca ligeramente podrá despertar nuevas sensaciones y curiosidades; y, a quienes la hemos vivido más que conocido nos ayudara a quererla más y tratar de disfrutarla mejor, algo muy importante en el presente”. Roberto Cassá.
Hay persona que le aspiran confianza por: la sinceridad, la humildad, dedicación, tesón en el trabajo y muchos otros valores. En este esquema esta Roberto Cassá. Quien sin importar de su légano al país, no ve a la persona por encima del hombro. Excúseme Profesor, pero estas palabras la tenia para usted. Aprovechando el reconocimiento que se le hizo en la Feria del Libro.
Sinceramente,
Dionicio de Jesús Peña.
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